miércoles, 3 de octubre de 2007

Buenas, aquí os pongo mi Cuento 6. Lo he escrito ya que estos días que están resultando un tanto lluviosos. Espero que sintáis lo mismo que élla cada vez que llueve o por lo menos que guste el relato. Ciaoooooooo

Bajo la lluvia

Era temprano y élla salia de su casa. Al segundo pie que ponía en la acera de la calle una gota caía del cielo y cayó sobre su nariz. Se detuvo. Instantáneamente una pequeña sonrisa afloró de sus delicados labios. Élla sabia que la tormenta era inminente y para élla los días lluviosos eran algo especial. Esa mañana élla debía haber cogido el autobús para ir a clase pero iba bien de tiempo y decidió ir andando. Cada vez llovía más fuerte. Empezó a andar con paso decidido por la calle mientras veía a las demás personas protegerse del agua con paraguas o andando por el borde de la calle para salvaguardarse en los edificios, élla no hacia ni lo uno ni lo otro. Élla iba por el medio de la calle para que el agua de los cielos le llegara de la forma más directa posible. Mientras andaba sentía que cada gota de agua que le llegaba a la cara la iba animando más y más. Por que élla no pensaba que dentro de un rato estaría empapada y fría, élla disfrutaba el momento. Élla disfrutaba sintiendo el agua recorrer su cuerpo, su cara, sus ojos, sus labios, para más tarde ser secada por su ropa. Para élla eso era un placer, para élla eso era como si un ser divino la tocara suavemente. Para élla el ser mojada por la lluvia le daba cierta sensación de libertad, ella no estaba atada a un pensamiento que la obligaba el llevar un paraguas o el ponerse un periódico sobre la cabeza para no ser mojado, sino que era libre para serlo. Para élla tenia otro carácter importante, élla pensaba que el agua de la lluvia nos libera de todo pensamiento innecesario mientras alzamos nuestras caras hacia el cielo y esperamos que decenas de gotitas impacten en nuestro rostro y sintamos que ellas recorrieran nuestro cuerpo, por que mientras disfrutamos de esas sensaciones, olvidamos todo lo que ocurre al rededor de nosotros, por que quedamos extasiados por esas sensaciones. Al llegar a clase estaba más mojada de lo que había pensado, habría de pasar varias clases hasta secarse por completo, pero daba igual, sabia que merecía la pena por que lo que había sentido debajo de ese llanto celestial. Élla al llegar a clase se apeno al ver a sus compañeros secos, ya que nunca entenderían lo que uno puede experimentar bajo de la lluvia.

Etiquetas:


see you~6:42|

---------